1.Formato del archivo

No se entendería el concepto de impresión sin definir el concepto inicial de archivo digital. Actualmente todo se inicia en un archivo digital, independientemente de la fuente de origen ( cámara, teléfono, scanner ...). El archivo digital viene definido por matrices bidireccionales, es decir, filas y columnas, donde la unidad mínima de información es el píxel.
Las cámaras digitales capturan las imágenes principalmente en 2 formatos: RAW y JPEG, al procesar con el ordenador o incluso con aplicaciones del teléfono encontramos formatos como tiff, png, psd, pdf y un largo etc.
En nuestro laboratorio se imprimen archivos .jpeg, que es el formato que reconoce automáticamente los dispositivos en nuestro flujo de trabajo ( quioscos y printer ). ¿Eso quiere decir que no podemos imprimir otros formatos? Sí que los podemos imprimir, sólo que quizás con un coste añadido si los tenemos que convertir a jpeg.

2.Color

¿Al imprimir puede suceder que no haya la misma tonalidad que se muestra en pantalla?
El espacio de color es un standard de colores codificados. Existen diferentes espacios de color, aquí explicamos algunos:
sRGB: El más utilizado en pantallas y cámaras es el sRGB, es el espacio de color más universal, pero tiene una paleta de colores reducida en comparación con el RGB. Es el espacio de color usado para visualizar una imagen en pantalla.
ADOBE RGB (1988): Es el espacio más utilizado en impresión en laboratorio. La mayoría de cámaras de gama media ya pueden capturar los colores descritos en este espacio, así como algunos monitores de gama alta.

En definitiva, una imagen puede estar representada por tonos diferentes si está representada en uno u otro espacio de color.

Otra diferencia de tonalidad que nos podemos encontrar al imprimir las fotos a papel y como se muestran en pantalla es obviamente cómo es la pantalla y cómo está configurada, en brillo, saturación y tonalidad, si es un portátil, por ejemplo, si funciona a plena batería o no, etc...

Es por ello, que para lograr la máxima fidelidad de tonos, todas las pantallas tendrían que estar calibradas por igual, porque, si no, cada una interpreta el color de una manera diferente. Haced la prueba, mirad la misma foto en un monitor, en una tablet y en un smartphone, ¿veis diferencias?, y, ¿en el papel impreso?. Pensad, que en nuestro trabajo tenemos los monitores y los equipos de impresión calibrados para lograr reproducir los tonos de color originales del archivo fuente.

3.Proporción

¿Al imprimir se corta la imagen?
Los archivos vienen determinados por el formato del sensor. A su vez el formato del archivo ( ancho y alto) determinará su proporción 3:2, 4:3, 1:1, 16:9, etc... y la resolución también determinará hasta la medida máxima imprimible para no perder calidad.
Por tanto, un archivo con una proporción 1:1 ( ¿ te suena instagram, verdad? ) si lo imprimimos en una medida 10x15 ( rectangular ) va a cortar imagen si no optamos por la opción encajar en el momento de imprimirla.

4.Otras consideraciones

La medida máxima que podemos imprimir nuestras fotos la delimitará la resolución.
Las fotos bajadas de internet normalmente tienen poca resolución, así como las fotos recibidas del whatsapp o aplicaciones similares, son normalmente, a baja resolución. Al retocar, editar, encuadrar tu foto original con alguna aplicación del smartphone es posible que baje la resolución del archivo, y por tanto, no se podrán imprimir en tamaños grandes.
Normalmente la impresión de fotos no se hace a sangre, es decir, hay que contar que la imagen puede cortarse algunos mílimetros al imprimir, otra opción es pedir las copias con margen blanco para no perder esos milímetros de imagen.

Y si has leído todo esto ...imprimimos?